Esta práctica se trata del proceso que hay que seguir a la hora de la cura de heridas, principalmente las provocadas por la cirugía menor.
El procedimiento está compuesto por una serie de pasos que son:
1. Lavado de manos.
2. Pedir al paciente que se tumbe o siente en una posición cómoda y quitar el apósito o gasa que esta cubriendo la herida, doblarlo sobre si mismo y tirarlo al contenedor que corresponda, dependiendo de si está infectado o no.
3. Preparar el material necesario. Se puede diferenciar entre material esterilizado y no esterilizado, que es el que se coloca fuera del campo estéril (povidona yodada, suero fisiológico, esparadrapo). El resto de material es:
- Paño estéril.
- Guantes estériles.
- Gasas estériles.
- Jeringa y aguja estériles.
- Tijeras de Kocher.
- Pinzas de disección estériles.
4. Se coloca sobre una mesa normal o una mesa de mayo el paño estéril, desde la zona de la mesa más lejana a nosotros hacia la más cercana, para no tocarlo ni que puedan llegar gérmenes a él. Después vamos abriendo el material estéril sobre el paño, dejándolo caer sin tocarlo.
5. Para colocarnos los guantes estériles, abrimos el paquete por las esquinas, intentando tocarlo lo menos posible, y lo dejamos sobre el paño. Nos fijamos qué guante es el derecho y cual el izquierdo. Primero colocamos el guante de la mano no dominante con la mano dominante tocando solo el interior del guante, metemos los dedos y estiramos. Después metemos la mano no dominante en la que ya llevamos el guante, en el sobre que forma el otro guante, es decir, tocando solo la parte exterior. Cuando llevamos ambos guantes, nos los colocamos bien.
6. Montamos la jeringa con la aguja y la llenamos de suero fisiológico, con cuidado de no tocar la botella con los aguantes y pidiendo ayuda si fuese necesario.
7. Cogemos con la mano dominante las tijeras de Kocher y con la no dominante las pinzas de disección, y procedemos a hacer torundas con las gasas, doblándolas aproximadamente sobre si mismas 4 veces, dejando la parte más lisa y sin arrugas hacia el exterior, para que a la hora de limpiar la herida no se enganche y nos sea más fácil. Las impregnamos con el suero fisiológico de la jeringa.
8. Con la torunda impregnada de suero, procedemos a limpiar la herida con cuidado, dando pequeños toques hasta que quede limpia. Después podemos aplicar antiséptico con otra torunda de la misma manera para desinfectar la herida.
9. Con otra torunda seca, retiramos los restos que puedan quedar y secamos la herida.
10. Colocamos sobre la herida las gasas que sean necesarias hasta que quede tapada completamente. Nos quitamos los guantes y los desechamos. Ponemos esparadrapo para pegar la gasa, pero dejando espacio para que la herida respire.
No hay comentarios:
Publicar un comentario