Bibliografía 5 (20/10/14)

Smeltzer S. Tratamiento de pacientes con trastornos gástricos y duodenales. En: Brunner y Suddarth. Enfermería medicoquirúrgica. 10ª ed. México: McGraw-Hill; 2005 p. 1114-1125.

En este capítulo del libro se describen los trastornos del estómago y del duodeno, entre los que se pueden destacar:
  • ·         Gastritis: Consiste en la inflamación de la mucosa gástrica. Ésta se torna edematosa e hiperémica, además de presentar erosión superficial, secreta poco jugo gástrico y podría aparecer hemorragia. Se relaciona con hipoclorhidria o hiperclorhidria

        Hay dos tipos:

-       Aguda: dura de varias horas a varios días. Suele a deberse a imprudencias relacionadas con la alimentación , consumo excesivo de AINEs, consumo de alcohol, reflujo de bilis o radioterapia.
Pueden aparecer molestias en el abdomen, cefalea, lasitud, náusea, anorexia, vómito…
Por lo normal, el paciente se recuper al cabo de uno o dos días. No debe ingerir alcohol ni alimentos irritantes hasta que desaparezcan los síntomas. Si los síntomas persisten podría ser necesario administrar líquidos por vía parenteral.

-       Crónica: producto de exposición frecuente a agentes irritantes o de episodios recurrentes de gastritis agudas. Está ocasionada por úlceras gástricas benignas o malignas o por la bacteria Helicobacter Pylori, que se relaciona con enfermedades autoinmunitarias, uso de fármacos, factores de alimentación, alcohol, tabaquismo o reflujo del contenido intestinal hacia el estómago.  
Puede aparecer anorexia, acidez, eructos, sabor amargo, náuseas, vómitos y deficiencia vitamínica.
El tratamiento consiste en modificar la dieta del paciente, fomentar el descanso, reducir el estrés e iniciar farmacoterapia. H.pylori puede tratarse con antibióticos y un inhibidor de bomba de protones.
  • ·         Úlceras gástricas o duodenales: La úlcera péptica consiste en una perforación que se forma en la capa mucosa gastroduodenal, por la intolerancia a la actividad digestiva del HCl y de la pepsina, ya que no puede secretar suficiente moco y actuar como barrera. Es más frecuente en el duodeno que en el estómago. Pueden darse de manera simultánea. La úlcera crónica tiende a aparecer en la pared menor del estómago, cerca del píloro. La enfermedad es más frecuente entre los 40 y los 60 años. Se pensaba que la tensión y la ansiedad eran algunas de las causas, pero se ha demostrado que son resultado de infección con H.Pylori o relacionarse con aumento de secreción de HCl.
Aparece dolor o sensación urente en el epigastrio o espalda, que aparece en mayor medida cuando el contenido ácido erosiona la lesión y estimula las terminaciones nerviosas expuestas. Otros síntomas son pirosis, vómitos, estreñimiento, diarrea o sangrado. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario